Leyendo y curioseando por la biblioteca del rectorado encontré esto. Me he molestado en pasarlo a digital. Merece la pena:
Corría el pleno Renacimiento y las Repúblicas itálicas luchaban por el poder y el control del comercio. Cuenta la historia que en una de estas tediosas y prolongadas guerras, entre dos de las joyas de la Península, Florencia y Venecia, ambos bandos comenzaban a cansarse de la pelea.Tras mucho dialogar llegaron a uno de los más extraños acuerdos de paz jamás vistos: El triunfador del conflicto sería el bando que poseyera, en promedio, a los integrantes con el pene más grande. En esa misma reunión, un florentino, Poggio Bracciolini, dijo que sin duda alguna los venecianos serían los triunfadores. Como es lógico, sus compañeros estaban por saltarle encima para darle una lección, sin embargo Poggio muy rápidamente replicó:
"Es evidente, que son los mejores dotados -refiriéndose a los venecianos-, puesto que su miembro viril posee tal longitud que llega a cubrir enormes distancias. ¿Cómo se explica de otra manera que, cuando pasan varios años a cientos de millas de su hogar a causa de sus viajes,encuentren a su retorno que son padres de dos y hasta tres criaturas?" Tras esto la guerra prosiguió su curso…
2 comments:
Me ha recordado ésta historia a otra:
Un general norteamericano le ofrece como premio a tres de sus soldados 10 dólares por centímetro midiéndose de un extremo al otro del cuerpo.
El primero le dice:
- De la cabeza a la punta de los pies.
El sargento:
- 180 cms. Son 1800 dólares.
El segundo:
- De la punta de los dedos de las manos a la punta de los dedos de los pies.
- 220 cms. 2200 dólares.
Y el tercero:
- De la punta del miembro a los huevos.
El sargento le dice:
- Está usted seguro?
- Sí, señor.
Total, que el sargento empieza a medir y le dice:
- Pero, donde están sus huevos?
- Los dejé en Vietnam, señor!
Muy bueno el chiste Mario. Ni Pepe lo habría contado mejor!
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