Saturday, June 28, 2008

Tardes de imposibles


Vi el pase a la final en Madrid. Casualidades de la vida, por esta ciudad han pasado esta semana mañicas, amigas granadinas... y gente de Michigan. Buscamos un cutre-bar en la zona de la calle Arenal, y empezó el espectáculo.

Era un local pequeño. Dos grandes mesas... pero abarrotadas. En una de ellas, un grupo de amiguetes madrileños, trabajadores del barrio (dependientes, fontaneros, empleado de loterías...), con perro incluido. Todos uniformados con los colores de España, pintados hasta las cejas (y las calvas). Y sobre su mesa, sólo un vaso, del que todos bebían. Era un florero de 5 litros de capacidad, que descansa en el bar desde hace años, esperando en una vitrina hasta que suceden eventos míticos como el del jueves.

En la otra mesa estábamos nosotros, cañeando, tapeando y cada vez más gritones. Rápidamente la atmósfera nos unió: gritos de España, insultos al árbitro, apoyo a la "roja"... nos llevaron a pintarnos también con los ya míticos colores, beber del florero, compartir las tapas...

Apareció por allí una cámara y una reportera de "La Sexta", que nos acompañaron durante todo el partido. Grabaron al perro, entrevistaron a algunos, y también tapearon con nosotros. El dueño del bar, también en ese éxtasis de camaradería, sacó una pata de jamón de lomo salado y dijo aquello de: "sirvase usted mismo". El hueso, por supuesto, fue para el perro, que aullaba apoyando a la selección.

El momento sublime fue el tercer gol. Un brasileño, hincha de la selección, dependiente de una tienda en esa misma calle, se levantó de golpe, comenzó a saltar, se subió en una mesa... y nos enseñó su trasero con alegría y postín. La cámara de "La Sexta" no perdía detalle. Y todos nos preguntábamos atónitos por qué el culo de nuestro atrevido compañero tenía un color tan rojo.

Tardes como las del otro día son extrañas pero merece la pena vivirlas. Son tardes que te sorprenden con lo inesperado y lo imposible. Tardes en las que hasta el príncipe y su señora están a punto de romper el protocolo y besarse; en las que abandonamos las fronteras sociales, saltamos y nos abrazamos con el vecinos; en las que rozamos una felicidad imposible olvidando los demás problemas; y, por supuesto, tardes en que gana la selección.

8 comments:

El Cinéfilo Ignorante said...

Frente a la actitud de abominar del Mundial y la Eurocopa, dice Javier Marías que estos acontecimientos le dan a la gente una nota de alegría y de expectación.

Y es verdad. No con La Liga, que, en mi opinión, es una mezcla de cateterío local y de capitalismo salvaje.

Ya hemos quedado para ver la final, que yo todavía creo que es mentira después de tantos años de promesas frustradas.

Habría estado bien disfrutar de ese España-Rusia en la calle Arabial...

¡Y, por una vez, la bandera roja y amarilla deja de ser patrimonio facha...!

Bobby said...

Ah, Polo! Recuerdo cuando, allá hacia finales de los 80s, estando en tu piso apareció tu hermano con una camiseta de la "selección". Si no recuerdo mal era muy forofo no? Recuerdo que decía: "Esto es lo último que hago por ellos, que siempre nos defraudan". Supongo que habrá hecho muchas mas cosas por la "roja", y que éstos les habrán defraudado muchas más... esperemos que hoy no!

Anonymous said...

Bobby, siento meterme en tu blog y hacerlo de este modo pero es que no estoy nada de acuerdo con Polo.
Polo, la bandera roja y amarilla siempre ha sido y será patrimonio de los españoles pero, mientras haya gente como tú, solo podremos sucir nuestra bandera sin complejos en acontecimientos deportivos.
Un saludo a todos y VIVA ESPAÑA!!!
P.D.: y no soy nada facha, ni de derechas pero si muy española

Anonymous said...

¡¡¡¡CAMPEONES!!!!

megan saltzman said...

another reason why i don't care for sports... :-/

Anonymous said...

Polo, permitenos ser catetos, aunque sea por unas horas, jeje, no soy futbolero, veo algunos partidos, pero la selección, y encima esta eurocopa, he visto todos los partidos de la selección, menos el primero que estaba en quirófano, y a parte he visto todos los cuartos, las semifinales, que quieres que te diga, he disfrutado todos los partidos, han sido bastante buenos, disputados y con nervios.
Además nos sirve para deshinibirnos, quitarnos nuestras corbatas y nuestros "modales del té", para pasar a "modales de bar", incluso sirve para que la gente olvide por unas horas problemas serios que ven en el horizonte y vean allí a lo lejos la luz de la esperanza.


un saludo, anonimogr

Anonymous said...

Campeones
como mandan los cánones.
Con talento y con 2... CASILLAS.

Un abrazo
CHB

El Cinéfilo Ignorante said...

Con lo del cateterío me refiero a la Liga Española, que parece la Bolsa llena de accionistas ignorantes y de empresas privadas.

¿Cuántos madrileños juegan en los dos grandes equipos de Madrid? ¿Cuántos nativos de Villarreal hay en el equipo que lleva este nombre?

Pero la Eurocopa y el Mundial es otra cosa. ¡Estoy feliz por la victoria!