Monday, January 28, 2008

Permitidme tutearos, imbéciles


Probablemente conozcáis el artículo que, el 23 de diciembre de 2007, publicó Arturo Pérez Reverte. Yo no lo conocía hasta ahora. Pego abajo el comienzo y remito a su página web para leerlo al completo. Estemos más o menos de acuerdo con lo que dice, es obvio que el intelectual tiene que mojarse, tiene que mancharse con lo que le rodea. El intelectual orgánico no es intelectual. Quizá a veces hay que perder un poco la diplomacia, decir lo que se piensa a borbotones, con sentido, pero lo más real y abiertamente posible; en ocasiones, suavizando las palabras segamos la realidad. Y lo que pasa en este país con la Educación puede ser un buen ejemplo.

'Cuadrilla de golfos apandadores, unos y otros. Refraneros casticistas analfabetos de la derecha. Demagogos iletrados de la izquierda. Presidente de este Gobierno. Ex presidente del otro. Jefe de la patética oposición. Secretarios generales de partidos nacionales o de partidos autonómicos. Ministros y ex ministros –aquí matizaré ministros y ministras– de Educación y Cultura. Consejeros varios. Etcétera. No quiero que acabe el mes sin mentaros –el tuteo es deliberado– a la madre. Y me refiero a la madre de todos cuantos habéis tenido en vuestras manos infames la enseñanza pública en los últimos veinte o treinta años. De cuantos hacéis posible que este autocomplaciente país de mierda sea un país de más mierda todavía [...]'


7 comments:

Anonymous said...

Me extraña que no hubieras tenido noticia de esto antes. Es muy bueno, especialmente el apartado en el que hace referencia concreta a Andalucía, ¿no crees?. Pero tampoco se atisba en su crítica ni un ápice de constructividad ni una propuesta concreta ni como académico de la lengua, ni como padre preocupado por la educación de sus hijos. ¿Alguna sugerencia?

El Cinéfilo Ignorante said...

Conocía el artículo de Reverte y da en el clavo. Es un hecho que los asesores del Ministerio de Educación, los que en momentos de fantasía se les ocurrió elaborar la funesta LOGSE, los inspectores de las 17.000 autonomías, los pedagogos (en su mayoría) y demás ilusos NO CONOCEN LA REALIDAD ESCOLAR. Tampoco la familiar, claro. Y qué fácil es echarle la culpa "al anterior gobierno".

Anonymous said...

Si, fue un artículo que destilaba toda la mala leche y rabia que suele llevar dentro.

No creo que sea labor suya decir como debe enmendarse este guirigay, porque aunque sea académico y padre, eso no le da mayor sabiduría en el tema. Todos somos profesionales y algunos sois padres, y que alguien me diga como se puede solucionar... desde luego, algo imprescindible es que dejemos de mirarnos el ombligo y comparemos nuestras leyes y maneras con el resto... y no con los más perdedores... si hay que compararse con alguien hay que compararse con los mejores... palmaditas de consolación en la espalda las justas...

Jesús said...

Me ha llegado por un amigo por correo, aparte de que Reverte parece parodiarse a sí mismo, me pareció como esos correos que dicen que son de Gabo y no son, o con citas de Borges que nunca dijo, si es de él parece que según avanza en edad aumenta el número de insultos por renglón, como desahogo la verdad que es cojonudo. No sé cómo estará la educación (habla con profesores a ver qué te dicen), pero lo de imbéciles, qué merecido que lo tienen algunos. Estuve a punto, por lo catárquico, de colgarlo en mi blog, te me has adelantado.

Anonymous said...

Creo que puedo estar en desacuerdo con algunos, jeje, y creo que lo que pretendía Reverte lo ha conseguido, que hablemos de un tema de categoría 1, casi de los más importantes y que los políticos se toman a cachondeo, ahora cambio, ahora cedo, ahora vasco, ahora "peo". Vamos una M como la copa de un pino.
Esta mañana escuchando la radio hablaban de una profesora de univesidad, de derecho que comentaba a sus alumnos el tema de regularizaciones o algo parecido, hablando de Filipinas uno le dijo, "claro, como está en sudamerica" y otra hizo una apreciación parecida.

Soy padre y me preocupa mucho la educación de mis hijos, que aprendan que adquieran cultura, tanto que dispongo de una cantidad importante del sueldo para que puedan tener cultura, algo que en el futuro les permitirá, por lo menos hablar con corrección.

Y es que teniendo una ministra de cultura que fué "cocinera antes que fraila" pido por favor que por lo menos cultura, da igual lo de los porros de Tierno Galván, pero con algo en la cabeza, y encima con 17 sistemas educativos diferentes, una grandisima M.

Un saludo, Anonimogr.

PD. EL taco es bastante español y un buen "coño" en su momento imprime un caracter a la expresión que nadie en el mundo.

(dejemos la "pooolla" granadina aparte, jeje)

Anonymous said...

Awen estoy de acuerdo contigo, pero también es comodísimo echarle la culpa a los demás, y esperar que los redentores políticos de turno o "papá Estado" solucione todos nuestros problemas. ¿Es que la apatía de la sociedad española no tiene límites? Desde luego que tenemos lo que nos merecemos.

N said...

Por lo que se, a los pedagogos ya sean investigadores, trabajen en centros o en cualquier otro ámbito educativo, le preguntan poco. No se si ilusos o no, pero lo que conozcan de la educación, que a veces es hasta más que otros, no se les tiene en cuenta.
Un problema más que gordo de la LOGSE fue que no se le consultó a los maestros (estos si deben conocer algo la realidad escolar) y que sus principios teóricos que no están tan mal, no se resolvieron en la aplicación propuesta. De hecho, no se dieron medios.
Si llega la ley de calidad basada en otra ideología y desmontando lo que estaba mal montado para transformar una base que, de haber llegado al final, hubiera dividido la pablación en "listos", "normales" y "torpes", arreglamos poco.
La educación la mataron entre todos y ella sola se murió.
Y la educación está basada en la escuela, los medios de comunicación y la familia. Los políticos inútiles hacen mucho daño, las leyes educativas como armas arrojadizas en cada legislatura, más. Y entender la libertad de expresión como medio para echar mierda sin estar documentado los unos sobre los otros, me parece grave. Pero Pérez Reverte lo está y lleva hasta razón.